A pesar
de que los modelos de enseñanza han cambiando bastante lentamente a lo largo del
tiempo, intento imaginar, en 2030, una escuela que ayude, lo más que pueda, a
los alumnos a desarrollar habilidades y destrezas necesarias para su vida
profesional.
Viajando
a través del tiempo, me imagino clases con grupos muy pequeños de alumnos, que
vienen de diferentes nacionalidades, y profesores que ententan trabajar de la
manera más personalizada posible con cada uno de ellos, enfrentándose a sus
necesidades.
El uso de las TICs en la enseñanza será indispensable y todos los
alumnos tendrán la posibilidad de hacer clases en zonas abiertas, en Plain Air, a contacto con la naturaleza.
Me imagino clases impartidas de modo “Transversal” donde se abordarán - desde
la escuela primaria hasta al bachiller - temas realmente importantes para vivir
mejor y en un mundo mejor. El contacto con la naturaleza creará una conexión
con el alumno, inextirpable, que lo llevará a respetar el entorno como si fuese
su propia casa, ya que nuestro entorno es nuestra casa. Además, se abarcarán temas
relativos a la higiene, conducta sexuales, alimentación, uso de sustancias
nocivas ect. para que los chavales crezcan disfrutando la vida mejor que
puedan.